Es en 4 y 613, a dos cuadras de dos escuelas y a menos de 300 metros del destacamento, del club de fútbol y de la salita de primeros auxilios. El año pasado aparecían ratas en el mismo lugar en donde a diario pasa el colectivo.

Durante la pandemia, hace casi cuatro años, la esquina de 4 y 613 de barrio Aeropuerto se convirtiendo de un terreno baldío en el que los chicos improvisaron un potrero para jugar al fútbol, hasta un basural, pasando también por un nido de ratas que se fue acumulando en la zona.

Los vecinos del barrio se habían comprometido a limpiarlo, y en las últimas horas comprobaron el accionar de un grupo de changarines que descargan mercaderías en el mismo lugar.

A pocos metros vive Ángel, un histórico frentista de la calle 4 entre 613 y 614, quien hizo “causa común” con otros referentes del barrio como Julio Guiñazú, quien vive en el cruce de 617 y calle 4. Todos ellos fueron testigos de cómo fue mutando el uso del terreno que está en la 613, casi en el ingreso a la zona de los edificios que tiene el Barrio que está dividido del predio del Aeropuerto de la ciudad por la avenida 7.

“Desde la municipalidad vinieron a llevarse la basura a finales de la semana pasada. Es decir que por un lado se limpió lo que otros vecinos irresponsables de la zona tiran, Pero atrás de ellos vinieron unos changarines en horarios en donde no suele frecuentar mucha gente en la calle y dejaron escombros en la misma esquina”, señaló Julio, quien hace más de cuatro años vienen reclamando por mejoras en esta zona de la ciudad. Este espacio de manzanas también limita con el denominado “barrio Frisón”, lugar que fue muy afectado en tiempos de restricciones por la pandemia, debido a la falta de agua y de luz, y que con el paso de los meses fue encontrando soluciones.

Además de la esquina de 4 y 613, por la que además pasa el colectivo y dentro de veinte días estará llena de chicos a la mañana y a la tarde que irán a las escuelas primaria y secundaria del barrio, también se junta mucha basura en 617 y 3. Allí se había iniciado un conflicto vecinal entre las personas del barrio, ya que hubo quienes se adjudicaron la propiedad del terreno que está sobre la 617 entre 2 y 3, mientras que había otras personas que impulsaron un proyecto para hacer una plaza para los niños de la zona y así generar una conciencia social para que se deje de arrojar basura.

Para el caso, tanto en la zona del Frisón como en la de barrio Aeropuerto, dividida por escasas tres cuadras, los vecinos volvieron a poner en el tapete la necesidad de encontrar una solución a la basura que suele juntarse en esta zona de la ciudad. Fuente Diario Hoy.