Obra de Veredas: Pasaron del No se puede hacer más lento a levantar una cuadra en la semana

   Los muchachos se tomaron su tiempo para arrancar de lleno con la obra de las veredas. Cuando todo parecía que iba a quedar en 20 metros de ambas manos en la cuadra de avenida 7 y esquina 73, pareciera que pusieron primera y en menos de una semana desmontaron una cuadra entera.

   Hasta ayer por la tarde una veintena de trabajadores de la comuna avanzó con el desmonte y armado en avenida 7 de 73 a 74 del lado mano a la avenida 90.  El anuncio se hizo en marzo a mediado de mayo de este año en donde adelantaron que en Villa Elvira comenzaba el plan "Veredas a la obra" con la remodelación de avenida 7 de 72 a 80.

   La medida, beneficiosa en un futuro, preocupó a los comerciantes locales que temieron por el cierre de sus comercios y pidieron una condonación impositiva. Esta mañana, hablamos con Mauro, que justamente se encontraba sacando el polvo que le provocó la obra de su comercio de artículos de limpieza.

   Justamente opinó por el trabajo realizado y dejó trascender que estaba preocupado por los plazos teniendo en cuenta la demora que originó la apertura de las obras en los 20 metros anteriores que llevaron casi un mes.

    Finalmente, el nuevo tramo de trabajos se hizo de manera más rápida y no viene causando los inconvenientes de la etapa anterior que sufrió una larga demora, perjudicando la transitabilidad y también con el tema de seguridad porque la toldería que habían levantado provoco tapar el frente de un local que acabó siendo robado en la esquina de 7 y 73.

   En este caso, el comerciante contó que “las obras van rápido, delimitaron sin los telones lo que permite la visibilidad de los comercios” y agregó que “en cierta forma nos perjudica porque muchos clientes que tienen problemas de movilidad eligen otras opciones. Lo bueno que acá el trabajo se está haciendo más rápido que en la cuadra anterior”.

  El ilusionista argentino, nacido en Tandil, conocido mundialmente, inmortalizó con sus jugadas que sorprendían a propios y extraños una acuñable frase que decía: “no se puede hacer más lento” y eso pensaron los vecinos que llevaban viendo de manera perpleja el ritmo de obra que habían adquirido las veredas.

   Algo cambió en los últimos días que hizo que los trabajos tuvieron un ritmo importante el cual les permitió avanzar de forma considerable.

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