En muchos barrios de la localidad, cuando llega la noche, el vecino si no tiene que salir se guarda por una cuestión de seguridad. Acaso se escuchará el ladrido de los perros, algún auto que pasa o la juntada de jóvenes y sus cortes con las motos.
Pero el frentista no sale a mirar. Tiene miedo. Sufre, calla y quiere gritar de impotencia. La calle hace rato que la ganó la delincuencia. Si será difícil la situación que en muchos de estos barrios se ha observado que las luces LED colocadas para mejorar la visibilidad, han desaparecido casi sistemáticamente. Hasta los cables se han llevado.
El llamado de Laura de 94 entre 5 y 6, advirtiendo la falta de las luces por robo, como así también otras comunicaciones de vecinos, no solamente en la zona de Tricolores, sino de Villa Montoro, Villa Alba o Aeropuerto, han mostrado esta situación. Se llevaron las luminarias.
Las calles que antes eran alumbradas por magras luces amarillas que a veces prendían, ahora permanecen a oscuras, apenas iluminadas por las lámparas que ubican los vecinos en los frentes de sus viviendas.
No solamente se han robado las luces Led de los postes, sino que se han llevado hasta el cableado en muchas zonas, dejando cuadras prácticamente a oscuras. Lo más anecdótico de todo esto, según aportaron fuentes confiables, los ladrones queman en cable que le robaron a sus propios vecinos en la zona, para sacarle el cobre y llevarlo a los reducidores que, dicho sea de paso, nunca son noticias por comprar el cableado robado.