La mañana en los centros de votación, como cada vez que hay elecciones, se convierten en caóticas a raíz de la ausencia inesperada de autoridades de mesa. Las elección del domingo tuvo su momento épico en Villa Elvira cuando en una mesa de Villa Montoro, el primer votante se quedó a regañadientes como autoridad, pero luego se fue del lugar de votación.
La anécdota arrancó temprano en el centro de votación del Club Villa Montoro en 96 y 118, en donde según relatan fuentes allí presentes, la apertura de la mesa 420 se vio demorada por la falta de autoridad de mesa.
Arrancada la mañana y con gente que iba poblando las otras mesas, un ciudadano se acercó para celebrar su voto sin advertir que la autoridad electoral en compañía de las fuerzas de seguridad lo nominaron como presidente de mesa.
El vocero que contó esta información sostuvo que luego de una hora de comenzada la votación, el presidente de mesa acusó deseos de ir al baño por lo que un gendarme quedó al cuidado de la urna.
Minutos después y ante la insistencia de recomenzar, siendo cerca de la 10.30, un fiscal de mesa se acercó al baño y pudo comprobar que el “presidente” ya no estaba en el lugar. Apuntaron las fuentes consultadas que las fuerzas de seguridad salieron en su búsqueda y que la mesa prosiguió de la mano de otra persona.
En este caso, el Código Electoral Nacional prevé penas de 6 meses a 2 años de prisión para las autoridades de mesa que no asistan a cumplir sus funciones sin haberse excusado, es decir que en la máxima pena prevista para ese delito no hay pena de prisión efectiva