La falta de agua en Villa Elvira y sus alrededores dejó de ser novedad el primer día de calor del 2022, a partir de ese momento las canillas se secaron y el servicio comenzó a ser un karma.
En muchos sectores donde el domiciliario llega con boleta y es abonado por el gran número de vecinos, vale la aclaración porque existen en la región infinidad de enganches que resienten la provisión en un amplio sector de la localidad, el servicio es casi nulo y la gente ha perdido la paciencia ante la falta de respuestas.
En Barrio PAMI, enclavado desde hace muchos años en la manzana de 74-75 entre 117 y 118, manzana compuesta de 45 vivienda en donde la mayoría de sus pobladores son adultos mayores o discapacitados, sienten que la situación los ha superado y que ya no encuentran formas para generar sus pedidos.
“No hay agua, absolutamente nada, ni la Institución de PAMI, ni ABSA dan respuesta alguna” se quejaron los vecinos de allí.
“La situación es una vergüenza, los servicios al día, miles de reclamos y nada de agua, digno de merecer para lo esencial de la vida, necesitamos solucionar este problema de manera Urgente” explicaron los moradores del lugar.
Como gran parte de la región, ese sector se surte desde la Usina del Bosque que tantas fallas ha marcado durante los meses de calor y desde donde se ha agarrado la empresa para justificar el pésimo servicio en tiempos de calores insoportables.