Representa a la copa de leche “Juan Domingo” de 617 entre 5 y 5 bis y desde hace muchos años se ha convertido por gestión, impulso y trabajo en una referente del Barrio Frisón.

   Se trata de Alejandra González que, junto a Erika Soledad Orillo, Oscar Leandro Mikel, Ivan Sixto, Sheila Jacqueline Rahn, Maidana Maite Federica y tantos otros que colaboran, le ponen el hombro a la solidaridad.  En el lugar asisten a más de 100 niños, a adultos y muchos de los casos que tienen son de discapacidad o problemas de celiaquía, según expresaron.

   Es empleada de la comuna y en su momento acompañó el desempeño de una cooperativa de trabajo que garantizaba la limpieza y mantenimiento del barrio hace algunos años.

   Alejandra es una gran guerrera que pelea por su barrio al que define como “Frisón es un cuadradito entre Barrio Aeropuerto y Parque Sicardi, costó años para que el barrio sea reconocido por su nombre y está ubicado de 613 a 622 de 3 a 7”.

   “Acá tenemos el honor de tener como vecinos a 3 ex combatientes, al famoso paya policía que durante años dio alegría con el festejo del Día del Niño, a un “Papá Noel” que sale todos los 23 de diciembre a las 21 a retirar las cartitas de los vecinitos a cambio de golosinas y también recorre algunas salas del Hospital de Niños” aportó Alejandra.

    Desde hace 15 años Papa Noel y Reyes magos hace su paso por todo el barrio (613 a 622 de 3 a 7) retirando sus cartitas a cambio de golosinas, esto con ayuda de vecinos, amigos, compañeros, bingos y rifas

   Además, agregó que “contamos con el Comedor “Las Tablitas” con María Eva acompañando a las niñeces en su desarrollo. También destaco a nuestro barbero solidario que antes del comienzo de clases se encarga que los niños y adolescentes estén presentables, tenemos un barrio con militantes de buena madera y otros no tanto”.

  De esta manera, la vecina no quiso olvidarse de otros vecinos del lugar “Frisón es un barrio que dejó el paso de buena gente como Don Martin Gorosito empleado municipal; Karina Díaz, una mujer que floreció y transformó su historia para bien, de “Pocha” la abuela del Comedor las tablitas; de Kili, Samuel, Cesar “titi”, Carlitos, Matías, Joaquín y Sheila personas que dejaron huellas y un gran vacío”.

  “Frisón fue creciendo y sus calles del barrio dejaron de ser pantano y se transformaron en asfalto, hoy y hace bastante, diría exactamente 10 años de olvido y como casi toda Villa Elvira la veo abandonada en estos 6 meses con más cráter, con caminos tapados de pastizales, con basurales, sin luminarias, sin obra hidráulica, sin seguridad” denunció.

   Para finalizar, la dirigente social, remarcó que “me encantaría una Villa Elvira amada, con los privilegios de zona norte, necesitamos compromiso del estado Municipal para una Villa Elvira acorde a su crecimiento, porque se lo merece porque si hay algo que remarcar es que acá, la localidad es solidaria y aún pasándola mal”.