Este fin de semana NVE salió a caminar junto a los vecinos de Villa Montoro para mostrar la situación que viven a lo largo del año los frentistas que deben circular por 117 de 90 a 96. Los frentistas se comunicaron por el 221 6000379 para mostrar la situación del lugar.
El tramo donde la calle pareciera angostarse y las veredas que las veredas se afinan es un corredor de dispares pedidos que van desde la iluminación, algunos afirman que las rompe gente con otra intenciones, la seguridad y las altas velocidades.
El primer reclamo que escuchamos es que en la zona del puente, a la altura de 92, los que realizan la limpieza dejan los desperdicios junto a la calle pero que el camión no lo paso a levantar por lo que se suman los malos olores que ya tiene el Maldonado.
En ese sentido, es importante mencionar que los olores que despide este importante drenaje a cielo abierto que tiene la localidad tienden más a cloaca que agua que drena hacia el Río de La Plata y sería de suma conveniencia que sea analizada.
Por su parte, el tema de la iluminación es un pedido constante porque cada tres o cuatro meses son cambiadas las luminarias, según nos dicen los vecinos, pero al tiempo dejan de andar. Quedando la zona a oscuras y dejando a los vecinos más expuestos a los robos, que ya los hay y, en su mayoría, a manos de motochorros que van y vienen por esa arteria sin que se realicen controles. Algo similar ocurre de Montoro para el 19 de Febrero, en la 90 de 117 a la Ruta donde se han registrado infinidad de robos.
Un punto importante que marcaron los vecinos son las altas velocidades y la necesidad de contar con reductores de velocidad. Por lo general por lo irregular de las veredas, tanto chicos como adultos, usan la calzada para ir y venir de sus hogares y esto ha provocado varios accidentes.
Por último, una vecina hizo hincapié en avenida 90 y 117 existe un predio en donde hay descarga de carreros y que en la zona se esparce muchos residuos pero que el Municipio no atiendo. Lo mismo apuntaron respecto al drenaje de las zanjas del lugar que están en su mayoría tapadas de mugre, barro o totoras.